Desde los primeros instantes te darás cuenta que Las Palmas de Gran Canaria no es una urbe corriente. Goza de una interesante mezcla de culturas que ha ido acumulando a lo largo de su historia gracias a la influencia de navegantes y piratas que han llegado desde todos los puntos del globo (incluyendo los archiconocidos Cristóbal Colón y Francis Drake). Posee un pronunciado aire portuario y colonial que convive en armonía con una ciudad cada vez más moderna pero que no olvida sus profundas raíces canarias. Las paradojas se suceden constantemente en este destino de las Islas Canarias porque lógicamente es una ciudad que mira con deseo al mar, pero que a la espalda está protegida por esbeltos picos de origen volcánico que acentúan más si cabe esta interesante mezcla.
Playas de ensueño o laberintos de callejuelas estrechas en sus barrios antiguos también se pueden convertir en un improvisado patio de juegos para los más pequeños de la casa. La capital de la isla es muy amable con las familias su clima tropical tiene parte de la culpa) y lo tiene todo para unas vacaciones que aúnen dosis de descanso con inquietudes culturales y las comodidades y distracciones de una villa de casi 400.000 habitantes. Aburrirse no es una opción, así que vamos a recomendarte 10 planes muy divertidos para hacer en Las Palmas de Gran Canaria con niños.
Experimentar en el Museo Elder de la Ciencia y la Tecnología
Si alguna vez nos preguntaran qué debe poseer un museo para que cautive la atención de un niño responderíamos que todo lo que tiene el Museo Elder de la Ciencia y la Tecnología de Las Palmas de Gran Canaria. No descubrimos la pólvora si decimos que los niños como mejor aprenden las cosas es jugando y lo fascinante de este centro es que todo está pensado para que los peques manipulen, escuchen, toquen y experimenten.
Además de tener exposiciones fijas y temporales ciertamente interesantes, los niños se lo pasarán de miedo con materias que probablemente en el cole les parezcan más aburridas. Desde conocer cómo es un avión por dentro y pilotarlo, descubrir que se siente al ser director de cine con los truquitos del Chroma Key, soñar con los límites del universo en el planetario o aprender a jugar con los juguetes de nuestros abuelos. No te lo pienses, es uno de los planes imprescindibles para hacer en las Las Palmas de Gran Canaria con niños.
Jugar a ser descubridores en la Casa de Colón
Las Palmas es una de las ciudades más importantes por las que pasó Cristobal Colón antes del descubrimiento. De hecho, en su primer viaje al Nuevo Mundo tuvo que detenerse en la capital de Gran Canaria a reparar la célebre Pinta antes de cruzar el charco en busca de lo desconocido. Se puede rememorar aquel importante acontecimiento visitando la Casa de Colón en el pintoresco barrio de Vegueta. Pero tranquilo que no tiene pérdida, el edificio donde se encuentra llamará de inmediato tu atención gracias a su preciosa y colorida arquitectura.
Aunque no se sabe a ciencia cierta si Colón estuvo en la antigua Casa del Gobernador, la colección de objetos relacionados con la navegación y las aventuras del almirante es fascinante. Lógicamente lo que más les llama la atención a los niños son los loros que residen en uno de los hermosos patios, pero la visita merece muchísimo la pena independientemente de la edad que tengas.
Visitar las momias del Museo Canario
Muy cerquita de la Casa de Colón, también el el barrio de Vegueta podrás visitar el curioso Museo Canario. Está emplazado en la antigua residencia de Gregorio Chil y Naranjo, el que fuera el impulsor de un proyecto que tenía como objetivo el desarrollo científico y cultural de Las Palmas de Gran Canaria. Actualmente cuenta con una exposición monográfica dedicada a la población aborigen de Gran Canaria.
Nunca nos hubiéramos esperado que nuestros hijos se entretuvieran tanto en un museo etnográfico, así que la visita fue una sorpresa muy agradable. Pese a que sólo tiene cuatro años, a nuestro hijo Oriol le encantan los temas de ultratumba. Suponemos que es una mezcla de miedo y curiosidad, pero le atraen las historias de fantasmas, vampiros o brujas. Para que se enganchara con la visita le contamos que en el Museo Canario había muchas momias y no paró de buscar hasta que finalmente las encontró. Lógicamente permanecieron inmóviles, pero conseguimos que no les quitara un ojo de encima hasta que abandonamos el edificio.
Jugar con otros niños en el Parque de San Telmo
Siempre decimos que cuando se viaja con niños debemos dejar algún momento para que los peques tengan su propio tiempo y espacio para jugar. Sinceramente nos sorprendió la ingente cantidad de parques, jardines y espacios verdes que tiene Las Palmas de Gran Canaria. Tras algún día repleto de actividades decidimos que Teo y Oriol disfrutaran jugando con otros niños en el fantástico Parque de San Telmo.
Es muy fácil de ubicar porque está junto a la estación de Guaguas de San Telmo en pleno barrio de Triana. A los papás nos llama la atención el precioso Quiosco Modernista diseñado por Rafael Massanet y Faus pero a los niños les llama la atención la espectacular zona de juegos infantiles (con barco incluido) en la que pronto hicieron algún que otro amiguito de Las Palmas.
Ver los dragos, ficus, y palmeras en el Parque Doramas
Si el Parque de San Telmo es para jugar, el de Doramas es para soñar con los antiguos bosques y vegetación que cubría Gran Canaria antes de su desarrollo urbanístico. Está situado en la zona de Ciudad Jardín junto al célebre Hotel Santa Catalina (que ese día alojaba a los jugadores del Atlético de Madrid) y merece ser disfrutado con calma y mucha atención.
Tiene unas avenidas enormes para que los niños puedan correr a sus anchas mientras disfrutan del colorido de las flores o del rumor de las aguas de las cascadas y riachuelos artificiales. También hay zonas de juegos, pero merece mucho la pena dedicar un rato a observar los magníficos dragos, ficus, palmeras y numerosas especies autóctonas de las Islas Canarias. Un pulmón verde y multicolor ideal para desconectar y relajar a las fieras.
Chapuzones y relax en la Playa de las Canteras
Nunca hubiéramos sospechado que una playa urbana escondiera tantos secretos como ésta y por eso no nos extraña que esté considerada una de las mejores del mundo. Buen clima casi todo el año, fina arena dorada bajo tus pies y una fauna y flora marina sin parangón a muy pocos metros de la orilla. Con un contexto tan privilegiado es lógico que todos los oriundos adoren este lugar y los visitantes se lleven un bello recuerdo de la Playa de las Canteras.
Desde La Puntilla hasta el Auditorio Alfredo Kraus tiene tres kilómetros de extensión ideales para disfrutar del mar, jugar en la arena o caminar por el paseo marítimo. Además, la zona está atestada de bares, restaurantes y tiendas por lo que se ha convertido en el corazón de una ciudad que mira con orgullo al mar. Las Canteras es célebre por su famosa barra, un arrecife emplazado en paralelo a la orilla de la playa y que hace las funciones de rompeolas natural. Esta playa no tiene nada que ver cuando la marea está baja, pues aparecen como por arte de magia sus pintorescas formaciones rocosas.
Kayak transparente con niños en Las Canteras
Descubrir la ciudad de Las Palmas de Gran Canaria desde el mar en kayak transparente es un plan que recomendamos a cualquiera, incluso si viajas con niños pequeños como nosotros. No te cortes, porque es una excursión muy sencilla en la que no hace falta ninguna formación previa y la experiencia es realmente maravillosa (puedes leer aquí lo bien que lo pasamos practicando kayak en Las Canteras).
Esta actividad acuática no está pensada para gente con grandes condiciones físicas, sino para personas con ganas de aprender sobre el entorno tan especial que existe en la playa de Las Canteras y disfrutar de una perspectiva un tanto distinta de la ciudad de Las Palmas de Gran Canaria. Teo y Oriol no tuvieron que palear y se dedicaron a alucinar con los fondos multicolores de Las Canteras y a tratar de identificar a alguno de los peces que de vez en cuando asomaban debajo de las piraguas.
Debajo del mar, snorkel en familia en Las Canteras
A pesar de que hemos viajado a paraísos como el Caribe o el sudeste asiático, no recordamos ninguna playa urbana con tanta vida submarina a tan pocos metros de la orilla como Las Canteras. Pese a que el snórkel es una actividad muy sencilla, es importante mantener la calma para que paso a paso vayas habituándote a respirar por el tubo y a moverte lentamente impulsándote con las aletas.
Superado el momento de adaptación, sólo queda especio para el disfrute. Un universo multicolor de peces te aguarda a cada aleteo. No hay que tener una vista de lince ni ser un Sherlock Holmes para encontrarlos, están por doquier. La cantidad y variedad de especies es apabullante. Sargos, salemas, pejeverdes, fulas, gallos, caballitos de mar, erizos, estrellas… y suma y sigue. Contemplarlos a todos y cada uno es una sensación de euforia que difícilmente se puede describir con palabras (te contamos aquí nuestra experiencia practicando snorkel en Las Canteras).
Caminar sobre los volcanes de la Caldera de Bandama
Cuando descubrimos una ciudad por primera vez siempre tratamos de hacer alguna actividad relacionada con su entorno natural. Cuando piensas en Las Palmas de Gran Canaria lógicamente la primera idea que te surge suele estar relacionada con el mar, pero a muy pocos kilómetros se encuentran lugares tan fascinantes como la caldera volcánica de Bandama o el Pico de Bandama. Es ciertamente tentador el hecho de poder hacer turismo rural tan cerca de una ciudad tan cosmopolita como la capital de Gran Canaria.
Se puede acceder hasta el punto más alto en coche y allí tienes un mirador que te regala unas vistas que quitan el hipo de la isla. Además, hay un búnker de mediados del siglo XX que ha sido rehabilitado recientemente y que también se puede visitar. Si dispones de tiempo, cálzate unas buenas botas y anímate a recorrer alguno de los espectaculares senderos que rodean la caldera volcánica de Bandama. Sin duda, uno de los lugares más sorprendentes de Las Palmas de Gran Canaria.
Un paseo por Las Palmas de Gran Canaria en tuk tuk
Si vas con algo de prisa y quieres visitar algunos de los rincones más emblemáticos de Las Palmas de Gran Canaria, te recomendamos una experiencia realmente divertida que les encantó a nuestros hijos. Se trata de un paseo en tuk tuk como si estuvieras moviéndote por Bangkok o Nueva Delhi… pero sin la contaminación ni el ruido de estas metrópolis asiáticas. De hecho, el vehículo que pillamos en el Parque de Santa Catalina es 100% respetuoso con el medio ambiente.
Estos peculiares tuk tuk eléctricos de la empresa Green Trip son una forma rápida y muy original de recorrer la ciudad. Tienen varias rutas que duran entre 45 y 90 minutos y unos precios muy asequibles. Desde los populares barrios de Vegueta y Triana hasta la playa de Las Canteras pasando por los mejores miradores de la ciudad. Además, con Wi-Fi gratuito a bordo.
¿Te han gustado estos 10 planes divertidos para hacer en Las Palmas de Gran Canaria con niños? ¿Te gustaría recomendarnos otros lugares que no aparecen en esta lista? ¡Esperamos tus comentarios!
Tienes más información en la web de turismo de Las Palmas de Gran Canaria.
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