La gastronomía tailandesa merecería por sí misma un viaje, así de rotundo. A los thai les encanta comer y eso se nota en los buenos restaurantes y también en los puestos callejeros que son capaces de improvisar en cualquier lugar con un fogón y los ingredientes necesarios para prepararte cualquiera de sus especialidades. Si un local o tenderete es bueno lo notarás enseguida por las enormes colas que se forman para probar sus recetas.
Tailandia tiene hasta cuatro regiones culinarias claramente diferenciadas e influencias de muchísimos países de Asia, especialmente de China y Oriente Medio. Esa combinación provoca que la comida sea muy alegre, un pelín picante, repleta de colores, con sabores realmente exóticos y siempre elaborados con productos frescos. En mi viaje a Bangkok disfruté como un enano y creo que le hubiera pasado lo mismo a cualquier persona a la que le guste comer bien.
No soy ningún entendido en la cocina tailandesa, así que entraba en un restaurante o me paraba en un puesto callejero y me pedía lo que mejor pinta tenía o lo que me apetecía probar en ese momento. Voy a recomendaros algunos locales que me gustaron, pero no os toméis las siguientes sugerencias como un mantra, es muy complicado comer mal en Bangkok o en un viaje a Tailandia.
The Mint
Se trata de uno de los restaurantes del Triple Two Silom, el hotel en el que me alojé durante mi estancia en Bangkok. Mezclaba platos de la cocina tailandesa con recetas internacionales, incluso españolas. Los precios eran un pelín elevados para la ciudad, pero la calidad de los platos era realmente extraordinaria. Aquí probé mi primer pad thai, uno de los iconos de la gastronomía tailandesa. Aceptaban pago con la Tarjeta Gold American Express (promotora de los premios Bloguero Gold de los que soy finalista).
Somboon Seafood
Esta cadena de restaurantes cuenta con siete locales repartidos por toda la ciudad y es uno de los mejor valorados por los locales para comer marisco. Yo me puse las botas en una cena opípara a muy buen precio. El mejor recuerdo de la noche fue un impresionante curry de cangrejo, un plato que debería probar cualquier persona que viaje a Bangkok. Todavía se me hace la boca agua al recordarlo. Como en la mayoría de locales de la capital de Tailandia se paga en efectivo.
The Jim Thompson House Restaurant
Además de disfrutar de la visita a la espectacular Casa de Jim Thompson (un imprescindible de Bangkok) el complejo tiene un restaurante excepcional. Los precios se acercan más a los estándares europeos que a los tailandeses, pero merece la pena pagar un pelín más por probar esos platos tan ricos en un entorno realmente agradable. Fue aquí donde descubrí el Tom Kha Kai, una sopa de pollo con leche de coco de sabor suave, poco picante y muy aromatizada. No dejes de probar sus zumos de frutas frescas. Aceptaban pago con la Tarjeta Gold American Express.
Chinatown
No es una recomendación de un restaurante concreto, sino de una zona donde la gastronomía es un verdadero placer para los sentidos. Hay decenas de puestos y locales repartidos por doquier y la mayoría con un éxito inversamente proporcional al aspecto del comedor. Mesas sin manteles y servilletas de plástico pero en Chinatown probé los mejores fideos o palitos de pollo gracias a las recomendaciones de Pol y Ple. También es fácil encontrar aletas de tiburón, aunque no las probé por su elevado precio y por la forma tan cruel de obtenerlas. Pago en efectivo.
Puestos callejeros
No te cortes, tienes que probar la cocina callejera de Bangkok. Encontrarás puestos casi en cualquier esquina de cada calle. Salteados como el de la foto, palitos, fruta fresca, jugos, fideos, arroces, postres… todo lo que te puedas imaginar a un precio irrisorio. Por ejemplo, este salteado de pollo lo comí al salir de un templo en un puestecillo diminuto. Estaba muy sabroso y sólo me costó 40 Bath (1 €). Seguro que andando por la calle (sea la hora que sea) encuentras algo que te apetezca degustar. ¡Cómo echo de menos el mango de Tailandia! Pago en metálico.
Insectos y bichos en Khao San Road
Esto no es una recomendación personal, ya que yo no me atreví a probarlos. No obstante, si sientes curiosidad por conocer qué sabor tiene un gusano, un grillo o una araña puedes encontrar numerosos puestos donde venden estas “exquisiteces” en los alrededores de Khao San Road. Esta foto la tomé de extrangis ya que me temo que el principal negocio de estos puestos es cobrarles a los turistas por las fotos y no por una ración de escorpiones. Pago en metálico.
Mango Tree
Esta franquicia la podrás encontrar en muchos lugares del mundo y fue el restaurante que escogí para despedirme de la cocina tailandesa en el Aeropuerto Internacional Suvarnabhumi. Tienen una carta completísima, aunque yo me decanté por el pato al estilo Ayutthaya y repetí con el Tom Kha Kai. Aceptan pago con la Tarjeta Gold American Express.
Galería de fotos de comida tailandesa
Quiero dar las gracias a American Express por haberme seleccionado como finalista de los premios Bloguero Gold, gracias a los cuales pude viajar a Bangkok con 200.000 puntos del Programa Membership Rewards® Club.
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