Es una historia muy contada en Naxos. Relatos de viajeros que, tras visitar la isla durante unos días, quedaron tan asombrados de su belleza que decidieron instalarse en ella. La más grande y también la más fértil de las islas Cícladas ha sabido seducir con sus encantos a quienes, huyendo de las aglomeraciones de otras islas, han preferido la autenticidad.
Naxos mantiene intactoel encanto tradicional de las Cícladas
Naxos es probablemente la isla más completa de las Cícladas. Todo lo que uno espera encontrar cuando visita las islas griegas está allí: mucho sol, deliciosa comida mediterránea, hermosas playas, pueblos tradicionales y, algo que no tienen otras islas, los restos arqueológicos mejor conservados del archipiélago. Por si todo esto fuera poco, Naxos es también una de las islas más económicas.
Las playas de Naxos están consideradas las más bellas del archipiélago
Es entonces cuando surge la gran pregunta: ¿Cómo es posible que un paraíso como éste no sea un destino turístico de primer orden? La respuesta se encuentra en el pequeño puerto de Chora, corazón y capital de la isla. Demasiado pequeño para que puedan entrar los mastodónticos barcos que cruzan el Mediterráneo, y demasiado cerca de Santorini, hermosa isla que ha perdido casi todo su encanto porque en ella desembarcan todos los cruceros sin excepción. Además, la mayoría de los turistas que llegan a Naxos se alojan en Chora, quedando el resto de la bella isla a entera disposición de los buscadores de rincones secretos.
Las playas de Naxos se encuentran sin ninguna duda entre las mejores de todo el Mediterráneo. No solamente por su incuestionable belleza. Tampoco por su longitud, siendo con diferencia las más largas de las islas Cícladas. Lo que más sorprende es la absoluta tranquilidad, lo fácil que resulta encontrar en esta isla una playa desierta, algo que contrasta con la masificación de las islas vecinas.
Playa de Alyko, en mitad de un parque natural
A lo largo de toda la costa este, al sur de la capital, se suceden interminables playas que, fuera de los meses de julio y agosto, son un paraíso para los amantes de la tranquilidad. Parece impensable que todavía queden en el Mediterráneo playas como las de Mikri Vigla, Alyko, Plaka o Kastraki, por citar solo algunas. Kilómetros y más kilómetros de arena blanca o dorada bañada por aguas cristalinas de un increíble azul turquesa y sin un alma alrededor.
Mikri Vigla tiene dos maravillosas playas, presdididas por el islote de Parthena
Pero por muy bellas que sean sus playas, la isla es mucho más que arena y mar. Para conocer la otra cara, basta con adentrarse en las escarpadas montañas del interior, entre las que se encuentra la montaña más alta de las Cícladas. A través de una estrecha y serpenteante carretera se accede a pintorescos pueblecitos que huelen a tradición. Las vistas durante todo el ascenso son espectaculares y permiten descubrir pequeñas iglesias ortodoxas literalmente colgadas de los acantilados, mientras a ambos lados de la carretera se suceden los viñedos y los campos de olivos, de los que extraen uno de los aceites de oliva más apreciados de toda Grecia.
Las sinuosas carreteras permiten conocer la otra cara de Naxos
El pueblo mejor conservado es Apeiranthos, cuyas casas y calles están completamente construidas en mármol, por lo que también es conocido como la Ciudad Blanca. Para llegar al centro histórico hay que ascender unas 60 escaleras, de mármol por supuesto, pero el esfuerzo merece la pena. Junto a las casas de piedra, se encuentran pequeñas tabernas con terrazas donde la población local pasa las horas charlando y tomando el tradicional café griego.
Casco antiguo de Apeiranthos. Conserva su encanto medieval
En interior de Naxos es el mejor lugar para acercarse a la vida local
La misma carretera que lleva a Apeiranthos, conduce a uno de los monumentos arqueológicos mejor conservados de las islas Cícladas: el templo dedicado a la diosa Dimitra, que data del 530 a.C. Tal vez no tenga la majestuosidad y grandeza del Partenón, pero a diferencia de éste, sin ningún turista alrededor, aquí es más fácil sentarse y observar en silencio la belleza y armonía de las construcciones de la Grecia Clásica.
Templo de Dimitra
De regreso a la costa, otra parada obligada es el pequeño puerto de Chora y su encantador casco antiguo. Adentrarse en los estrechos callejones del Kastro medieval es hacer un viaje al pasado veneciano de la isla, muy evidente en el castillo que corona la población. Pero lo que más me llama la atención es el laberinto de callejuelas y casas encaladas, de cuyos balcones cuelgan geranios y buganvillas, y las puertas y ventanas azules, tan típicas de las Cícladas, y embellecidas por el desgaste del paso del tiempo. Como lugar más turístico de Naxos, no hay calle donde no haya alguna tienda de suvenirs, pero a diferencia de otras islas, entre tienda y tienda hay también talleres artesanales, fruterías, panaderías y pescaderías de toda la vida.
El puerto de Chora mantiene su encanto tradicional
El casco antiguo conserva la arquitectura cíclada, de paredes encaladas y puertas y ventanas azules
Presidiendo el puerto se levanta la majestuosa Portara, que es lo único que queda de un antiguo templo dedicado a Apolo que se construyó en el siglo VI aC.
La Portara, junto al puerto, símbolo de la isla
Hoy la Portara, que parece una gigantesca ventana abierta al mar Egeo, se ha convertido en uno de los lugares más fotografiados de la isla, especialmente durante las hermosas puestas de sol que cada tarde embellecen este rincón olvidado del Mediterráneo. Y que siga así.
Puesta de sol en la costa este
CÓMO LLEGAR
La forma más rápida es volar a Santorini, vía Atenas, con Aegean Airlines. Desde Santorini salen varios ferries al día, que llegan a Naxos en unas dos horas.
QUÉ SABER
Formalidades de entrada: DNI o pasaporte en vigor.
Moneda: el euro.
Idioma: El inglés es habitual en las zonas turísticas. En las poblaciones del interior sólo hablan el griego.
Cuándo ir: Los mejores meses son Junio y Septiembre, cuando las temperaturas son más suaves y hay menos turistas que en Julio y Agosto. El mes más frío es enero.
Vacunas y precauciones: La isla es muy segura, incluida la capital, donde se puede caminar a cualquier hora con tranquilidad. No es necesaria ninguna vacuna.
CÓMO MOVERSE
El transporte público es limitado, por lo que para descubrir el interior de la isla y las playas menos masificadas es necesario alquilar un vehículo. Las distancias no son largas por lo que mucha gente se mueve en scooter o, todavía mejor, en quad. Conducir por la isla es fácil. Las carreteras son amplias y están bien señalizadas.
DÓNDE DORMIR
Naxos es una de las islas más económicas. Las diferencias de precio con Santorini o Mikonos son abismales. La mayoría opta por alojarse en Hora aunque, si se dispone de vehículo, una opción muy recomendable es alojarse en alguna de las paradisíacas playas que salpican la costa oeste.
Para los amantes de la tranquilidad, ahí va un secreto: Mikri Vigla. A sólo 17 km de la capital, ofrece dos hermosas playas prácticamente desiertas. Hasta el momento el turismo parece haber olvidado este maravilloso rincón de la isla.
En Hora: Mathiassos Village Hotel. Es un conjunto de bungalows que combinan la arquitectura de las Cícladas con las comodidades de un hotel moderno. info@mathiassos-village.com
En Mikri Vigla: Kontos Studios www.studioskontos.gr Estudios con cocina, sencillos pero muy confortables, situados delante de una de las playas más bellas de la isla (debajo)
QUÉ COMER
Con una tradición de más de 4.000 años y enriquecida por el contacto con oriente y occidente, la cocina de las Cícladas destaca por los productos frescos, las hierbas aromáticas y un excelente aceite de oliva. Particularmente famosas son las patatas de Naxos. También son protagonistas el pescado, los quesos, los yogures y el vino. Entre los platos destacan la Musaka (pastel de berenjenas, tomate y carne); el Souvlaki (brocheta de carne o pescado); el Tzatziki (salsa de yogur, ajo y pepino); la Fava (una especie de puré de legumbres amarillas) y los Mezze, aperitivos variados que se sirven al principio de cada comida junto con el Ouzo (licor dulce de unos 40 grados). Los pasteles también son muy apreciados, así como el café, parte fundamental de la vida cotidiana.
DÓNDE COMER
Como en el resto de Grecia, los restaurantes típicos son las tabernas, establecimientos informales que ofrecen comida de toda la vida, la que los griegos hacen en sus casas, por lo que abundan las recetas tradicionales. La guinda en Naxos, es que muchos de estos restaurantes se encuentran sobre la misma arena de la playa.
En Hora:
- Antamoma Deli Store. Cocina tradicional con toques modernos.
- Nostimon Hellas. Platos griegos y mediterráneos.
En Plaka
- Petrino Hermosa terraza en frente del mar. Uno de los mejores restaurantes de la isla. Platos exquisitos muy bien presentados.
En Apeiranthos
- Rotonda Taberna tradicional. Platos caseros y fabulosas vistas.
QUÉ COMPRAR
La artesanía tradicional, con mucha influencia de la antigua Grecia, está presente en todas las islas. Destacan las cerámicas, las esculturas de madera, el cristal soplado y los tejidos artesanales de Apeiranthos. También es famosa la joyería, con una buena relación calidad-precio, además de las antigüedades.
MÁS INFORMACIÓN
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