En casa del herrero cuchillo de palo. Solemos contarte muchas historias y aventuras de lugares remotos pero os hablamos poco (o casi nada) de lo que hacemos por nuestra tierra. Con la Comunitat Valenciana no podemos ser objetivos ni pretendemos serlo. Está repleta de rincones extraordinarios para pasar unos días de vacaciones en familia. Es célebre por sus playas y buen tiempo, pero también por la gastronomía (¿os hemos dicho que nuestros arroces nos vuelven locos?), unas fiestas llenas de color y tradición (como nuestros Moros y Cristianos de Alcoy), un patrimonio que te transporta a otra época (pasada o futura) y espacios naturales con paisajes impresionantes donde perderse sin rumbo es casi una obligación.
Y además… está Benidorm. Esta ciudad alicantina es una rara avis, un fenómeno turístico único e irrepetible que sorprende a propios y extraños. Habrás escuchado muchas cosas sobre esta metrópolis, pero sinceramente créete la mitad de la mitad. O mejor dicho, te invitamos a que te formes tu propia opinión después de haberla visitado, ya que Benidorm no se puede explicar con palabras… tienes que vivirla.
Kitsch para algunos, incomparable para otros… pero probablemente divertida para todo el mundo. Es imposible aburrirse en esta ciudad, sea cual sea tu estilo de vacaciones o tu fecha de nacimiento. Cierto es que nosotros la tenemos a menos de media hora en coche, pero todos los años la visitamos una o más veces por h o por b y siempre, siempre nos sorprende. Lo que sí que nos ha quedado muy claro es que se trata de una ciudad muy entretenida para los que viajamos con niños, por eso hemos querido compartir contigo 8 experiencias que harán que tus hijos quieran pasar sus vacaciones en Benidorm.
Ver los fondos marinos de la Isla de Benidorm
Jugar a piratas y enrolarte en un barco siempre es garantía de éxito cuando viajas con niños. En Benidorm hay muchas experiencias relacionadas con surcar las olas del mar sobre un bote, pero una de las más recomendables y divertidas es zarpar desde el puerto hasta la Isla de Benidorm. Se trata de uno de los iconos de esta ciudad alicantina emplazado a sólo dos millas frente a la metrópolis y con unas vistas alucinantes de los rascacielos. Llamada la isla de las gaviotas por la cantidad de aves de esta especie que habitan el islote, tiene unas aguas prácticamente transparentes que nada tienen que envidiar a las del Caribe. Lo puedes comprobar haciendo snorkeling en sus postrimerías o con la excursión en barco con fondo transparente que parte del pequeño embarcadero de la ínsula.
Bañarse en las playas y calas de Benidorm
Una de las claves del éxito del desarrollo turístico de Benidorm en las últimas décadas ha sido la calidad de sus playas. Las más celebre es la playa de Levante que suele salir a tope de bañistas cuando aparece cada verano por la tele para anunciar la llegada del verano (¿o eso le corresponde al posado playero de Ana Obregón?). Sin embargo, existen alternativas menos masificadas como la playa de Poniente, la Cala Ti Ximo, la Cala La Almadrava o La Cala Mal Pas que es nuestra favorita por lo tranquilas y claras que suelen estar sus aguas. Esta última es ideal para ir con niños pequeños.
Divertirse con la historia en Terra Mítica
Hemos pasado de no haber pisado un parque de atracciones en la vida a convertirnos en auténticos expertos desde que han nacido nuestros hijos. Terra Mítica lo tenemos muy cerquita de casa y por eso solemos repetir cada año. Por si no lo conoces es un parque temático ambientado en las grandes civilizaciones del Mediterráneo: Egipto, Grecia y Roma. Es casi imposible no pasártelo bien aquí, tengas la edad que tengas. Está repleto de atracciones perfectas para liberar adrenalina, aunque si viajas con niños pequeños como los nuestros también hay lugares donde disfrutarán de lo lindo. A Teo la que más le gusta es el laberinto del Minotauro. En verano también es interesante Iberia Park donde hay muchísimas atracciones enfocadas a los más pequeños que pueden pasar un buen rato a remojo. Los espectáculos de Terra Mítica también son impresionantes.
Una tarde en el circo
Teo y Oriol no son niños tranquilos precisamente. Hay pocas cosas que logren concentrar su atención más de media hora seguida, pero los espectáculos del Benidorm Circus consiguieron que estuvieran dos horas enteras sin pestañear. Se trata de una combinación de actuaciones de circo clásico y contemporáneo muy atractivas para el público familiar. Desde el humor más gamberro de los payasos a las acrobacias más inverosímiles de los trapecistas, pasando por bailes muy actuales. Los peques disfrutaron como nunca y nosotros alucinados de verlos tan quietecitos y soltando una onomatopeya tras otra. Sus caritas de asombro no tienen precio. Calidad y variedad para todos los públicos avalado por el premio Premio Merlín 2015 al Mejor Ilusionista que recibió su director David Climent.
Ver animales en Terra Natura… también de noche
Ya hemos estado cuatro veces en Terra Natura, pues es un lugar perfecto para pasar un día en familia. La combinación de animales salvajes, espectáculos de rapaces y zonas de juegos para los más pequeños de la casa hacen que esta especie de zoológico sea un fijo en nuestros planes desde hace años. En verano está mucho más animado que en invierno y desde hace poco han empezado los safaris nocturnos, una actividad muy emocionante para los niños en la que tienen ocasión de ver a los animales de cerca acompañados por un cuidador del parque. Teo y Oriol se metieron muchísimo en el papel de aventureros y pasaron unas horas increíbles dando de comer a los animales y aprendiendo muchos de sus secretos. Sin duda, una experiencia muy recomendable.
Espectáculos de delfines y leones marinos en Mundomar
En Mundomar Benidorm hay más de 30 especies distintas de animales, especialmente aves y mamíferos acuáticos. Es un parque muy familiar y las instalaciones están muy bien cuidadas. Los niños pueden dar de comer a los lemures y a las cotorras o ver de cerca muchísimas clases de loros, aves rapaces, reptiles, flamencos, tortugas, nutrias, pingüínos o bichos tan raros como los coatíes. No obstante, lo que más admiración suele despertar en los niños son los espectáculos de leones marinos y delfines. Además de las típicas acrobacias o piruetas de estos animales maravillosos, se tienen unas vistas preciosas del skyline de Benidorm. Si tienes oportunidad pídete un arroz en el restaurante del parque, te aseguramos que te encantará… llevamos repitiendo dos años seguidos.
Una gastronomía que te soprenderá
Las malas lenguas suelen decir que Benidorm huele a fish and chips por la cantidad de bares y restaurantes enfocados al turismo británico. Nada más lejos de la realidad. Os invitamos a que os deis un paseo por la zona próxima a la Plaça de la Constitució y la popular calle de Santo Domingo para descubrir locales que sirven propuestas deliciosas. A nosotros nos gustan especialmente locales como la Cava Aragonesa o el Tragantúa donde es fácil huir del póker “pizza, hamburguesa, nuggets, pasta” que suelen servir en la mayoría de restaurantes que aseguran disponer de un menú infantil. La gastronomía es deliciosa, muy variada y encima el ambientazo que hay por estas calles es espectacular casi cualquier día del año.
Chapotear en Aqua Natura y Aqualandia
Estos días que aprieta el verano de lo lindo apetece estar en remojo todo el día. Si encima te puedes deslizar por los toboganes de un parque acuático o refrescarte en piscinas de lo más variopintas pues mucho mejor. Para nuestro gusto Aqua Natura es más familiar, o mejor dicho tiene más atracciones para las edades de nuestros hijos. Si por contra buscas emociones fuertes te recomendamos Aqualandia, un parque acuático con 15 atracciones muy divertidas, algunas de ellas trepidantes.
Queremos dar las gracias a la Agencia Valenciana de Turismo por ayudarnos a hacer este reportaje y a descubrir rincones inesperados en una ciudad que conocíamos tan bien y a Visit Benidorm por cedernos algunas fotos más chulas que las nuestras.
via Pau http://ift.tt/1JwdkCt
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