Los más viejos del lugar recordarán que hace unos años solíamos celebrar la llegada del fin de semana probando alguna de nuestras cervezas del mundo. Hoy hemos querido recuperar esa tradición (que fuimos abandonando poco a poco cuando empezamos a viajar con niños) con la visita a la Heineken Experience, uno de los lugares más populares de Amsterdam para los amantes de la cerveza.
Lo que empezó a finales del siglo XIX como una pequeña empresa familiar creada por Gerard Adriaan Heineken, se ha convertido paulatinamente en una de las marcas más célebres del planeta. Es bastante habitual ver el nombre de Heineken asociado a grandes competiciones deportivas, artistas de talla mundial o eventos en los que se suelen dejar caer celebrities y famosos de cualquier ámbito. La meteórica evolución de esta compañía forma parte de la visita a la Heineken Experience en la antigua fábrica de cerveza de esta firma holandesa.
¡Buena idea para visitar la Heineken Experience de Amsterdam!
Cómo llegar a la Heineken Experience, horarios y precios
La antigua fábrica de Heineken está ubicada en el barrio de De Pijp (Stadhouderskade 78) a unos 5 minutos andando del mercado Albert Cuypmarkt y a unos 15 de la zona de los museos donde puedes visitar el Rijksmuseum y el Van Gogh Museum. No tiene pérdida porque desde bien lejos verás a gente haciendo cola para entrar al edificio de ladrillos donde puedes vivir la Heineken Experience. Si estás cerca de la estación central puedes tomar las líneas 16 ó 24 del tranvía y bajar en la parada “Stadhouderskade”.
Lo bueno de este lugar es que abre los 365 días del año, así que puede ser un recurso interesante por si llueve o hace mal tiempo en la capital de Holanda. De lunes a jueves los horarios son de 10:30 a 19:30 horas y el resto de días de 10:30 a 21:00 horas. Las entradas de adulto cuestan 16 euros, aunque hay descuentos para niños de entre 11 y 17 años y para grupos de más de 20 personas. Los menores de 11 años no pagan.
Cómo es la visita a la Heineken Experience de Amsterdam
Como apasionados de la cerveza, siempre nos había picado el gusanillo por saber cómo era la visita a la antigua fábrica de Heineken. En nuestro anterior viaje a Amsterdam nos quedamos con las ganas, así que no podíamos desaprovechar esta nueva oportunidad.
Ya habíamos estado en algunas fábricas de cerveza anteriormente (sin ir más lejos en la más grande del mundo en Lovaina) y temíamos que esta experiencia fuera más de lo mismo. Lo cierto es que la visita va claramente de menos a más. La primera parte se podría considerar más tradicional, pues simplemente vas recorriendo las antiguas instalaciones donde te cuentan la vida y milagros de la familia Heineken, te explican un poco cómo es el proceso de elaboración de la cerveza y también te van enumerando los ingredientes que emplean en el mismo.
Esta primera fase (algo más típica y tediosa) termina con la visita a los establos donde todavía guardan algunos de los míticos caballos de Heineken. Estos animales siempre han jugado un papel fundamental en la historia de la compañía, al principio como fuente de energía rudimentaria y actualmente como embajadores de la marca. Es muy probable que si viajas a Amsterdam te cruces con algún coche tirado por caballos con el logo de le cervecera holandesa.
Tras un rato bien largo de visita, llega uno de los momentos más esperados por los visitantes. La cata. Esta experiencia sirve para poner en práctica toda la teoría que se ha ido escuchando en los minutos previos y también como preludio a la parte interactiva del recorrido que en nuestra opinión es la más divertida e interesante de toda la Heineken Experience.
A partir de ese punto entras en una pequeña sala de cine donde proyectan un divertido vídeo sobre la elaboración de la cerveza al estilo 5D, es decir, tú te mueves con el personaje de la cinta, sientes los aromas y también notas alguna que otra sensación más física como pueden ser gotas de agua o brisas de aire.
Cuando sales, llegas a una especie de salón de la fama donde puedes ver imágenes y participar en experiencias interactivas de la ingente cantidad de eventos de todo tipo (especialmente deportivos) en los que se ha involucrado la compañia cervecera. Por unos segundos puedes convertirte en el capitán de tu equipo favorito de fútbol levantando la copa de la Champions League o sentir como los pelos se te ponen de punta al escuchar la haka de la selección neozelandesa de rugby.
También hay karaokes y muchísimos juegos divertidos que te dejan con muy buen sabor de boca y compensan en cierto modo la primera parte de la visita que es un tanto más farragosa. En nuestra opinión, hay otros lugares mucho más interesantes en Amsterdam, pero si eres un fan de la cerveza holandesa probablemente disfrutes con la Heineken Experience y, de paso, te puedes llevar algún recuerdo personalizado.
¿Has hecho la visita a la Heineken Experience de Amsterdam? ¿Te gustaría conocer este lugar? Cuéntanoslo en los comentarios.
Galería de fotos de la Heineken Experience de Amsterdam
Quiero dar las gracias a Visita Holanda y a KLM por haberme ayudado a regresar a Amsterdam para elaborar este reportaje
via Pau http://ift.tt/2yRzXlB
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