Si te decides a visitar hoy en día el Golfo de los Poetas (que en realidad se llama Golfo di La Spezia) o los pueblecitos que conforman Cinque Terre es fácil entender como personajes de la literatura universal como Lord Byron o Percy y Mary Shelley decidieron pasar un temporada de sus vidas en este idílico emplazamiento de la región italiana de Liguria. Se trata de pueblecitos encaramados al mar, con alguna cumbre a la espalda y que están salpicados con casitas pintadas de colores que se divisan desde lejos. Torreones, iglesias centenarias y palacetes conviven con pequeños puertos donde barquitas de pescadores se entremezclan con los ferris turísticos y transportes marítimos que facilitan desplazarse de un embarcadero a otro.
Al igual que los poetas pasaron varios años de principios del siglo XIX en estos parajes, pensamos que la visita a esta zona de Italia merece ser descubierta con pausa y en distintas épocas del año para saborearla poco a poco como si se tratara de un rico helado italiano. Sin embargo, una gran opción para una primera toma de contacto puede ser el nuevo crucero Rincones Secretos del Mediterráneo de Pullmantur. Vamos a descubrirte una de sus etapas más interesantes, en la que visitamos Portovenere, Cinque Terre y Lerici en una escala perfecta.
Portovenere, la joya más bella del Golfo de los Poetas
El nombre de Golfo de los Poetas data de principios del siglo XX. Fue el comediógrafo Sem Benelli el que acuñó el término al referirse a la cantidad de grandes escritores que habían vivido en algún momento de su vida en el entorno del Golfo di La Spezia. La lista de ilustres es realmente espectacular Dante Alighieri, Lord Byron, Percy y Mary Shelley, George Sand o Marguerite Duras por citar unos cuántos nombres. Pero, ¿qué encontraron todas estas mentes pensantes en este lugar bañado por el mar de Liguria?
La respuesta la empiezas a encontrar desde que el barco atraca frente al coqueto puerto de Portovenere y te vas acercando a esta localidad italiana con un bote rápido. Uno de los aspectos que más nos sorprendieron de este viaje (puedes leer aquí las 10 experiencias que más nos gustaron del crucero Rincones Secretos del Mediterráneo de Pullmantur) es que las escalas son bastante largas. Si lo sumas a que en las excursiones que te ofrecen a bordo aprovechas muy bien el tiempo, puedes llevarte una primera impresión de estos lugares muy pertinente.
Como ya hemos contado, la pequeña localidad marinera de Portovenere es la primera toma de contacto con esta preciosa zona de Italia. Desde 1997 este bucólico rincón del Golfo de los Poetas está incluido entre los lugares Patrimonio de la Humanidad de la UNESCO, junto con las islas Palmaria, Tino y Tinetto y Cinque Terre. Nada más poner un pie en su pequeño puerto te quedarás prendado de sus casitas de colores y su espectacular conjunto de edificios y monumentos que es, a todas luces, insólito para un pueblecito de menos de 4.000 habitantes. Lógicamente tanta belleza hace que esta cifra aumente considerablemente en temporada alta entre los veraneantes de la zona y los turistas que quieren inmortalizarse en sus calles y cuestecitas.
Desde el puerto es casi una obligación dar un paseo atravesando el arco de entrada al municipio que está jalonado por una torre que te conduce a la parte alta del pueblo. El objetivo final de esta agradable caminata entre tiendecitas de pasta, souvenirs y heladerías es la preciosa Basílica de San Lorenzo que fue construida por los genoveses en el siglo XII. Por el camino también verás la base de dos molinos de viento que están considerados los más antiguos de Europa. En esta zona, también se encuentra el Castillo Doria.
Las vistas desde ese punto del pueblecito son encantadoras, pero también son muy sugestivas las de la zona de la Iglesia de San Pedro emplazada sobre el mar. Este templo es realmente antiguo, ya que en su actual ubicación se levantaba un un lugar de oración de los romanos dedicado a Venus. De hecho el nombre de Portovenere significa el “Puerto de Venus”. Muy cerca hay una ventana que parece un marco desde la que se observa la Grotta dell’Arpaia que es popularmente conocida como el Cueva de Byron. Justo desde este punto el poeta inglés Lord Byron cruzó el golfo de La Spezia a nado para visitar al matrimonio Shelley en Lerici, nuestra siguiente parada.
Lerici, fuente de inspiración para Percy y Mary Shelley
Justo en la otra punta del Golfo de los Poetas se encuentra la localidad de Lerici. En coche son unos 40 minutos de recorrido, pero en barco se llega bastante antes y de paso puedes ver desde el mar lo bello que es este destino del mar de Liguria. De hecho, cuesta entender como ante tanta delicadeza se inspiraron algunos de los textos de terror más célebres de la literatura. Suponemos que Lord Byron, Mary Shelley, Percy Shelley y otros escritores huyeron de Gran Bretaña para conocer mundo y, muy probablemente, para encontrar climas más benignos. Sin embargo, cuando empezaron su periplo en 1816 la iracunda erupción del volcán Tambora en Indonesia provocó grandes anomalías climáticas en todo el mundo y propició el conocido como “año sin verano”.
Lerici, que actualmente tiene unos 10.000 habitantes fue un pueblo muy importante durante la Edad Media, especialmente tras acoger a la comunidad judía que huyó de España tras su expulsión. Aunque siempre estuvo bajo disputa de Génova y Pisa, fueron los primeros los que dominaron tradicionalmente la ciudad. Ese dominio se puede ver todavía en la arquitectura y en el estilo decorativo de sus monumentos y fachadas donde se pintan ventanas o esculturas para aparentar cierta opulencia. Curioso trampantojo.
Un buen lugar para empezar la visita de Lerici es la piazza Giuseppe Garibaldi, auténtico epicentro de la localidad con sus casas de colores, su torre y muchos edificios decorados en ese sorprendente estilo genovés. Desde allí, un buen paseo es el que te lleva hasta el Castello di San Terenzo. Primero porque esta fortaleza te regala unas vistas estupendas del Golfo de los Poetas, y segundo porque puedes ir callejeando y subiendo escaleras por callecitas que se retuercen y que te teletransportan varias siglos atrás.
Si te da tiempo también puedes ir hasta la Casa Magni cerca de la aldea de San Terenzo que fue la residencia de los Shelley mientras vivieron en Lerici. Mary nunca fue feliz en esta casa a la que describió como un “calabozo”. Además, su marido Percy Shelley murió el 8 de julio de 1822 cuando regresaba de Pisa a Lerici en su velero tras ser sorprendido por una tormenta. Sin embargo, en Lerici también vivieron buenos momentos, como cuando Lord Byron llegó a nado desnudo desde Portovenere para tomar el té. Los lugareños lógicamente se refirieron a ellos como los “locos”.
Cinque Terre, mar y montaña en la bella Liguria
Habíamos escuchado tantas alabanzas sobre la belleza de Cinque Terre, que habíamos marcado esta visita en letras de oro dentro del itinerario del crucero Rincones Secretos del Mediterráneo de Pullmantur. Y lo cierto es que la visita a estos pueblecitos de Liguria no defrauda para nada. Tras curiosear por Lerici, regresamos a Porto Venere y desde allí tomamos un barquito que va parando en cada uno de los pueblos de Cinque Terre a excepción de Corniglia que no tiene acceso por mar.
Se conoce como Cinque Terre a un área que comprende una extensión de terreno de unos 22 kilómetros y que abarca desde la Punta di Montenero hasta Punta Mesco. Si navegas desde Portovenere poco a poco te irás encontrando con Riomaggiore, Manarola, Corniglia, Vernazza y Monterosso. Quizás sean estos dos últimos los más populares de todos por su belleza y fisonomía. Lógicamente en una escala de crucero no te da tiempo a conocerlos todos a fondo, pero es interesante hacer una visita al menos a un par de ellos para disfrutar de su belleza y peculiar morfología.
Los cinco pueblos que conforman las Cinque Terre tienen en común que albergan una iglesia con mucha historia en su casco urbano y un santuario emplazado en la montaña, además de callejuelas estrechas atestadas de restaurantes y tiendecitas. Lo que más suele llamar la atención desde el mar son sus casitas de colores. Aunque las viviendas cambien de propietario, siempre se debe pintar con la misma tonalidad, unos pigmentos que se respetan desde tiempos inmemoriales y que servían a los pescadores y marineros para reconocer sus hogares cuando pasaban muchos meses faenando en alta mar.
Aunque sólo te dé tiempo a visitar un par de pueblos, tienes que estar muy atento en el viaje en barca, ya que a cada pocos metros va cambiando la perspectiva de los pueblos y te regalan estampas maravillosas. Luego también es recomendable dar un paseo por el casco histórico y observar el gran ambiente que hay entre turistas, tiendecitas y restaurantes que te seducen con sus aromas y colores. En verano suelen estar hasta la bandera de gente, así que nos alegramos de haberlos visitados a finales de septiembre. Como sólo pudimos conocer Monterosso y Vernazza, seguro que en el futuro volvemos a por más. Además, los cinco pueblos están unidos por varios senderos que son un verdadero tesoro para los amantes de las caminatas. Mar, montaña y pueblecitos de postal te aguardan.
Como ves, se puede aprovechar muy bien el tiempo durante una jornada del crucero Rincones Secretos del Mediterráneo de Pullmantur. ¿Qué te han parecido Portovenere, Cinque Terre y Lerici? Para nosotros la escala perfecta, aunque esperamos tus opiniones en los comentarios.
Fotos de Portovenere, Cinque Terre y Lerici
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