Seguro que alguna vez te ha llamado la atención alguna de esas refinadas porcelanas chinas decoradas con delicadísimos dibujos que evocan un paisaje montañoso casi onírico. La estampa totalmente bucólica suele estar formada por picos de cimas redondeadas que sobresalen de entre las nubes, riachuelos de agua fresca llenos de recodos que brotan de las cumbres y pinos cuyas ramas se retuercen como si bailaran con el entorno. El panorama es tan poético que parece irreal, pero lo cierto es que está sacada de un lugar tan auténtico como el Parque Nacional de Huangshan, la Montaña Amarilla en la provincia de Anhui al Este de China.
Tuvimos la gran suerte de ver estos paisajes declarados Patrimonio de la Humanidad por la UNESCO con nuestros propios ojos en un viaje de 10 días por Shanghái y el Este de China, y no sería nada descabellado decir que fue una de las mayores sorpresas de toda la ruta. Por si te animas a viajar al gigante asiático vamos a contarte cómo es la excursión a la Montaña Amarilla de Huangshan desde Shanghái o Hangzhou.
Excursión a Huangshan desde Shanghái o Hangzhou
Acostumbrados hasta el momento a metrópolis como Shanghái y Hangzhou, la llegada a la Montaña Amarilla o Huangshan fue para nosotros como un soplo de aire fresco… literal. Quién podría imaginar que a sólo 3 horas en tren de la ciudad más poblada de China se encontraba este paraíso que ha inspirado desde tiempos inmemoriales a pintores y poetas chinos con decenas de picos graníticos y sus pinos retorcidos que bailan entre las nubes y se esconden tras la niebla.
Pero, ¿cómo descubrimos éste lugar tan increíble? Se lo tenemos que agradecer a Irene de Youlan Tours, toda una experta en el gigante asiático, que nos recomendó conocer algunos lugares de la China que suelen quedar fuera de las rutas habituales. Huangshan estaba lo bastante cerca de Shanghái como para pasar en esta zona de la provincia de Anhui al menos un par de días disfrutando del senderismo, los paisajes de la Montaña Amarilla y pueblecitos declarados Patrimonio de la Humanidad por la UNESCO.
Cómo llegar hasta Huangshan desde Shanghái o Hangzhou
Aunque parezcan dos mundo completamente opuestos, llegar a Huangshan desde Shanghái es bastante sencillo. La forma más rápida de viajar es a través del tren de alta velocidad, un servicio que nada tiene que envidiar a nuestro AVE o al shinkansen japonés. Hicimos varios trayectos en este formidable transporte durante nuestro viaje a China y pudimos conocer de primera mano estaciones de tamaños descomunales en las que a penas vimos turistas occidentales… a pesar de que nuestro viaje era durante el mes de julio.
Desde la estación de Shanghai Hongqiao hasta Huangshan North (Huangshanbei) hay menos de tres horas de trayecto, de hecho, a ciertas franjas horarias del día hay trenes con menos paradas cuya duración es de sólo 2 horas y 32 minutos. El precio en primera clase de este recorrido oscila entre los 306 y los 330 yuanes (40-43 €) y en segunda clase entre los 191 y 206 yuanes (25-27 euros).
En nuestro caso, antes de llegar a Huangshan nos encontrábamos en la ciudad de Hangzhou en la provincia de Zhejiang y el trayecto en tren de alta velocidad es muchísimo menor. Desde la estación de Hangzhou East hasta Huangshan North hay 1 hora y 25 minutos (en el trayecto más corto). El precio en primera clase de este recorrido es de 189,5 yuanes (25 €) y en segunda clase 118 yuanes (18 euros). Podéis consultar los horarios y precios de los billetes en Baolau o en 12Go.
Al llegar a la estación de Huangshanbei (en la que hay que salir rápido del tren porque sólo se detiene 3 minutos) nos estaba esperando nuestro guía chino de Youlan Tours, William, y un conductor que en vehículo privado con aire acondicionado nos acompañaron a dejar nuestras maletas en la consigna de un hotel de la zona. La noche la íbamos a pasar en otro alojamiento en la Montaña Amarilla al que sólo se podía acceder a pie así que debíamos ir ligeros de equipaje.
Una vez nos pertrechamos con lo básico para andar por la montaña y pasar una noche en la misma, nuestro vehículo nos acompañó hasta la estación de Tangkou donde nos subimos a un autobús público que en unos 30 minutos te trasladaba hasta el párking de la entrada del Templo Yungu. Allí tomamos el teleférico de Yungu (uno de los primeros teleféricos utilizados en China) que cubre unos 750 metros de desnivel a unos 6 metros por segundo. Tras el trayecto sobre las nubes empezamos la primera caminata hasta llegar a nuestro hotel de montaña.
Debes tener en cuenta que el Parque Nacional de la Montaña Amarilla tiene cuatro entradas entre las que se encuentran la del Yungu Temple, el Pabellón de la Luz de la Misericordia, Xiaolingjiao y Songguan, aunque las más utilizadas por los senderistas son las dos primeras.
Nuestra recomendación para tu viaje a China:
Para nuestro viaje a China nos hemos dejado aconsejar y hemos reservado todos los servicios con Youlan Tours. ¿Por qué? Su principal punto fuerte es que son españoles que viven en China y organizan directamente todos sus viajes y excursiones. Se conocen de cabo a rabo un país tan gigantesco y complejo como China, así que siempre dan con el viaje que estás buscando. Además, Irene y todo su equipo destacan por su flexibilidad, cercanía y la calidad de todos los servicios que ofrecen al viajero que quiere descubrir la verdadera China.
Tienen viajes completamente a medida y son especialistas, tanto de los lugares más populares de China, como de joyas fuera de los circuitos habituales. Con ellos hemos descubierto los lugares imprescindibles que visitar en Shanghái, pero también rincones sorprendentes como la Montaña Amarilla, Hangzhou o Suzhou. Busques lo que busques de China sabrán como ayudarte.
El trato con Irene y el equipo de Youlan Tours siempre ha sido exquisito y muy cercano (siempre con contacto directo via WeChat) antes, durante y después del viaje. Además su equipo de guías locales de habla hispana e inglesa es realmente extraordinario. Gracias a ellos nos fuimos con la sensación de haber descubierto la China más auténtica, ya que había veces que éramos los únicos occidentales viviendo experiencias preciosas. Los recomendamos 100% si tienes pensado viajar a China.
Senderismo por paisajes que quitan el hipo en la Montaña Amarilla
Nuestro plan en Huangshan era hacer senderismo y disfrutar de unos paisajes sobrecogedores. Sin embargo, tras bajar del teleférico y dirigirnos a nuestro hotel de montaña ubicado a 1.600 metros de altitud, nos dimos cuenta de que las caminatas que íbamos a hacer en la Montaña Amarilla iban a ser muy distintas a las que estábamos acostumbrados en España.
Olvídate de los senderos de tierra y pistas forestales, ya que las excursiones por el Parque Nacional de la Montaña Amarilla se hacen caminando por escalones tallados sobre la piedra que serpentean en un eterno sube y baja repleto de recovecos hasta llegar a miradores simplemente alucinantes. Digamos que las escaleras gozan de un estado de mantenimiento perfecto y que hay rutas que no son excesivamente largas, pero la dificultad está en el constante subir y bajar de los peldaños. En ese sentido, es recomendable estar en un buen estado de salud y llevar calzado cómodo.
Al transitar todos por los mismos caminos de escalones, es fácil que haya aglomeraciones de turistas. Ten en cuenta que Huangshan es uno de los parajes de montaña más populares de China y suele estar bastante lleno de gente en temporada alta. Te recomendamos evitar los fines de semanas y fiestas locales, pero si no te queda otro remedio (como fue nuestro caso) aprovecha las primeras y últimas horas del día porque los teleféricos funcionan de 7:00 a 17:00 horas entre semana y de 6:30 a 17:00 horas los fines de semana. Cuando los teleféricos no funcionan, sólo quedará en la montaña la gente que se aloja en los hoteles, así que estará mucho más despejado.
Nosotros pasamos aproximadamente un día y medio en la montaña, por lo que tuvimos tiempo de hacer varias caminatas para descubrir alguno de sus miradores más célebres donde disfrutar del atardecer y el amanecer (aunque la niebla truncó este momento del segundo día).
Las rutas están muy bien señalizadas (en chino y en inglés) y los carteles van indicando en todo momento la distancia que queda hasta los lugares más emblemáticos. Ten en cuenta que sólo te marcan los kilómetros y no se indica el desnivel así que no te confíes. La mayoría de puntos de interés de la Montaña Amarilla tienen nombres muy peculiares y en cada uno de ellos William, nuestro guía chino de Youlan Tours, nos contaba alguna leyenda relacionada con el origen del nombre. Monjes, reyes, princesas, poetas y eruditos solían ser los protagonistas.
Las excursiones hasta el Begin to Believe Peak y Lion Peak son dos de las más populares y quedaban relativamente cerca de nuestro hotel. En los senderos pudimos disfrutar de las «cuatro maravillas» que puedes apreciar en el Parque Nacional de la Montaña Amarilla: pinos bellamente formados, fantásticos picos rocosos, su mar de nubes y las aguas termales. Nosotros disfrutamos de Huangshan en verano, pero en el hotel tuvimos la oportunidad de ver fotos de otras épocas del año y es como visitar cuatro paisajes completamente distintos.
Las caminatas son como ver antiguas las pinturas de pergaminos chinos cobrar vida. Nos encantó especialmente la excursión por el denominado West Sea Grand Canyon, que los lugareños dicen que es incluso mejor que el Gran Cañón del Colorado porque es verde y tiene vegetación. Sin duda, el lugar perfecto para descubrir a las interesantes singulares formaciones rocosas de Huangshan.
Dónde alojarse en el Parque Nacional de Huangshan
Mucha gente pasa el día caminando por los senderos del Parque Nacional de la Montaña Amarilla. No obstante, nosotros también te recomendamos que te quedes alguna noche en los hoteles de montaña que hay en la zona (y a los que sólo se puede acceder a pie) para relajarte y observar los bucólicos atardeceres y puestas de sol.
Ten en cuenta que al estar enclavados en pleno parque nacional los hoteles son bastante modestos y todo lo que consumen o necesitan (también los residuos) son cargados por portadores que suben y bajan escaleras sin parar cargados de un peso enorme. La imagen de los porteadores es bastante dura y propia de tiempos remotos. Irene de Youlan Tours nos recomendó el Beihai Hotel pues queda relativamente cerca del teleférico de Yungu y de algunos de los principales puntos de interés de la zona.
Hongcun y Xidi, pueblecitos con encanto y Tigre y Dragón
Si los días que pasamos en la Montaña Amarilla ya nos habían dejado un gran sabor de boca y la sensación de que habíamos descubierto la China más auténtica, el regreso a las laderas de las cumbres Huangshan acabaron de confirmarlo. No nos podíamos ir de la provincia de Anhui sin visitar las históricas villas de Hongcun y Xidi, declaradas Patrimonio de la Humanidad por la UNESCO.
De las dos, Hongcun es quizás la más peculiar. Primero porque tiene forma de búfalo de agua y segundo porque precisamente sobre las aguas del estanque de la Luna que lo rodean se grabaron algunas de las escenas más célebres de la oscarizada película de Ang Lee, ‘Tigre y Dragón’. No obstante, callejear por las laberínticas y serpenteantes calles de Hongcun y Xidi es una auténtica gozada. Además de los numerosos puestos de artesanías y comercios locales, es casi una obligación contemplar su urbanismo feng shui y muchas de las antiguas casas, salones y academias que se pueden visitar en ambas localidades.
Tras la visita pasamos la noche en la antigua ciudad comercial de Tunxi, donde además de disfrutar de su rica gastronomía local en su calle vieja, pudimos asistir a un espectáculo que es una especie de mezcla entre la ópera china y las acrobacias del Circo del Sol. Toda una experiencia.
¿Cómo llegar a China?
La última vez que viajamos a China lo hicimos con la aerolínea KLM via Amsterdam, sin duda, una de las formas más cómodas, rápidas y eficientes de llegar hasta el gigante asiático. Se trata de una de nuestras compañías aéreas favoritas para viajar a Asia, ya que al salir desde Alicante nos ahorramos una o varias escalas. Eso significa, además, mucho tiempo y dinero lo cual se agradece cuando viajas con niños.
Esta vez las buenas conexiones y conectividad de KLM entre España y Amsterdam y luego entre la capital holandesa y China hicieron que nuestro viaje a Shanghái durara poco más de 16 horas incluyendo el tiempo que esperamos cómodamente en el aeropuerto de Schiphol.
Nosotros nunca viajamos sin seguro de viaje
Nosotros nunca viajamos sin seguro de viaje… y menos cuando vienen los niños con nosotros. Siempre es conveniente estar protegido por lo que pueda pasar y más en un destino donde la asistencia médica de calidad es tan cara. Te recomendamos viajar a China con una póliza que te cubra en destino posibles accidentes, hospitalizaciones por enfermedad o contratiempos que puedan suponer un sobrecoste en tu presupuesto de viaje (ten en cuenta que la hospitalización o atención médica privada en China es extremadamente cara). Nosotros utilizamos el seguro de viaje de IATI Seguros porque tiene una cobertura superior a la media y ofrecen siempre un trato personalizado y rápido. Puedes contratar aquí el Seguro de viaje de IATI Seguros y sólo por ser lector de el Pachinko te aplican directamente un 5% de descuento.
¿Te ha gustado nuestra excursión a Huangshan? ¿Habías escuchado hablar antes de la Montaña Amarilla? Tenemos ganas de leer tus opiniones en los comentarios.
via Pau García Solbes https://ift.tt/2wsEU7B
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