En estos días se cumplen justo 10 años de mi primer viaje como mochilero. Por entonces yo tenía 20 años y prácticamente estrenábamos la ruta low-cost de Ryanair entre Girona y Bérgamo. Ha llovido mucho, pero quería conmemorar la fecha escribiendo sobre
Pompeya , una visita imprescindible cerca de Nápoles. Además de viejas anotaciones y recuerdos, he buceado en internet para ponerme al día y ofreceros algunos datos prácticos que ya no coincidían con mis apuntes. Lo que seguro que no han cambiado demasiado son esas antiquísimas ruinas, impresionante vestigio de lo que un día fue una ciudad romana esplendorosa.
Breve historia de Pompeya La antigua Pompeya fue una ciudad del Imperio Romano cuya fundación se sitúa hacia el s.VII aC. En época prerromana fue poblada por los oscos inicialmente y más tarde por los samnitas. Ya en época romana, se unió a otras ciudades de la región de Campania para luchar contra el Imperio, pero sucumbieron finalmente en el 80 aC.
Por su ubicación junto al mar, su cercanía a la Via Apia y su relativa proximidad a Roma (240km al sur) se convirtió a partir de entonces en un importante centro de operaciones para el comercio y el transporte de mercancías. Era, en términos generales, una ciudad animada en la que se vivía bien, como podéis leer en este
artículo de Muy Interesante. Los pompeyanos alternaban sus trabajos con buenas dosis de entretenimiento en el anfiteatro, las tabernas, las termas y los burdeles. Salvo algunas batallas campales entre vecinos de la zona -debidamente castigadas por el Emperador Nerón- la vida de Pompeya transcurría en relativa paz y armonía.
La historia negra de Pompeya empezó a forjarse varios años antes de la conocida tragedia del Vesubio. En el año 62 un terremoto dañó tan seriamente la ciudad que media urbe quedó destruida. Durante el largo periodo de reconstrucción hubo otros pequeños seísmos y, finalmente, en el año 79 se produjo la fatal erupción del cercano volcán Vesubio. Contrariamente a lo que se pueda pensar, los ciudadanos tuvieron suficiente tiempo para huir. Se cree que pasaron unas 24h desde el primer aviso hasta la terrible explosión que acabaría cubriendo de polvo las ciudades de la zona. Muchos pompeyanos sí huyeron en ese tiempo, pero otros muchos temían abandonar sus tierras o no tomaron suficientemente en serio la gravedad los incidentes. Los hechos se sitúan entre el 24 y el 25 de agosto, día en que todo quedaría finalmente sepultado bajo las cenizas.
Sitio arqueológico de Pompeya Pompeya y otras ciudades cercanas que también sufrieron la erupción, como Herculano, fueron olvidadas por la historia y permanecieron ocultas hasta mediados del s. XVI. Se cree que un arquitecto topó con numerosas ruinas hacia el 1550, pero por algún motivo no les prestó demasiada atención y fueron relegadas de nuevo al olvido. Finalmente, en 1709, un campesino redescubrió por casualidad las ruinas de Herculano cuando excavaba un pozo en la zona. Aquel campesino topó con una piedra de mármol y en los años siguientes se fueron extrayendo algunos objetos, pero no sería hasta 1735 cuando, por orden de Carlos III de España, se iniciaría una excavación en profundidad. Poco más tarde, en 1748, fueron descubiertas las ruinas de Pompeya.
Lo que hizo único aquel hallazgo, lo que convierten a este conjunto de ruinas en un tesoro de valor incalculable, fue el excepcional estado de conservación. Bajo la capa de cenizas, los edificios y calles de estas ciudades se mantenían en algunos casos prácticamente intactos, conservando incluso frescos y mosaicos. Y casi más asombroso e impactante fue encontrar en la piedra pómez los huecos dejados por los cadáveres de los pompeyanos. Estos huecos fueron rellenados con yeso y hoy podemos observar en diferentes lugares figuras de cuerpos humanos en la misma posición en la que les sorprendió la muerte. Algunas escenas pueden resultar macabras, pero no tienen precio como documento histórico. Es como si el tiempo se hubiera detenido en el año 79 dC.
El conjunto arqueológico de Pompeya, Herculano y la Torre Annunziata es Patrimonio de la Humanidad desde 1997.
Datos prácticos ·
Duración de la visita. El tiempo mínimo que se aconseja es de 2h, pero considero que es del todo insuficiente. Lo ideal es disponer de al menos una mañana entera (4h/5h). No olvidemos que estamos visitando los restos de una ciudad que en su día albergó a unos 20.000 habitantes.
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Lugares imprescindibles. Hay itinerarios recomendados en la
web oficial (italiano) y en la entrada del recinto, pero aquí os cito algunos puntos de interés destacados: el anfiteatro, la Palestra Grande, el Teatro Grande, la Casa del Fauno, el Foro, el Templo de Apolo, el Lupanar, la Villa de los Misterios (en las afueras), el Templo de Júpiter, la Basílica, las Termas del Foro y la Casa del Poeta Trágico, además del Anticuario (zona museo). En
este pdf hecho para cruceristas encontraréis un mapa de Pompeya con los lugares más destacados (y otras informaciones prácticas).
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Accesos. Existen 3 entradas: Porta Marina (la más usada), Porta di Stabia (Piazza Esedra) y Porta di Nocera (Piazza Anfiteatro).
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Precios. En 2013 el ticket para un día cuesta 11€ (5,50€ reducida)
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Horarios. Abre a las 08.30. De abril a octubre cierra a las 19.30 y el resto del año a las 17. Muy importante: la última entrada es 1h 30min. antes de la hora de cierre. Consultad precios y horarios actualizados en la
web oficial (italiano).
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Cómo llegar. La mayoría de visitantes llegan a Pompeya desde Nápoles y en muchos casos desde Roma. La mejor opción es el tren. Si se viene desde Roma hay que tomar un tren hasta Nápoles (2h) y desde allí se toma el tren de cercanías
Circumvesuviano dirección Sorrento. La fermata (parada en italiano) es Pompei Villa dei Misteri (30 min.). Esta es la opción más común, aunque también existe la posibilidad de tomar el Circumvesuviano dirección Poggiomarino y bajar en la fermata de Pompei Santuario, en cuyo caso entraremos por el acceso de la Piazza Anfiteatro. Una tercera opción recomendada en la web oficial es tomar un FS (
tren nacional) dirección Salerno y bajar en Pompei. En la web de
turismo de Pompei ofrecen otras indicaciones para llegar en bus, coche, etc.
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Consejos. Protegeos del sol en verano (puede ser un infierno). Contad con que allí se puede comer a un precio razonable. Preguntad por entradas combinadas (muchos italianos nos recomendaron que visitáramos Herculano incluso por encima de Pompeya, aunque al final no pudimos hacerlo). En Nápoles podéis vistar el
Museo Arqueológico si queréis seguir profundizando.
Enlaces de interés · Info turismo:
Pompei |
Nápoles |
Región de Campania |
Italia· Alojamiento: Es posible alojarse en Pompeya (la moderna Pompeya, claro), aunque lo más recomendable y lógico es buscar
alojamiento en Nápoles, donde encontraréis más oferta y mejores precios.
Fotos:(1) Anfiteatro. Autor: Thomas Möllmann. Fuente: Wikipedia (2) Templo de Júpiter. Fuente: Wikipedia (3) Calles de Pompeya. Autor: ho visto nina volare. Fuente: Flickr (4) Frescos en el Lupanar. Autor: Álvaro Remesal Royo. Fuente: Flickr (5) Figura humana en Pompeya. Autor: Ricardo SB. Fuente: Flickr (cerca de Nápoles, Italia)